¿Qué revelan tus prioridades sobre ti?
Cuando nos acercamos al final de la discusión de prioridades de este mes, ¿qué has aprendido? Como hemos leído en el primer blog de este mes, es tan fácil quedar atrapadas haciendo cosas que nunca deberíamos haber estado haciendo en el primer lugar. La autora Mary Tomlinson nos habló acerca de descubrir cómo nuestro propósito se relaciona con nuestras prioridades y que nuestras prioridades deben ser relativamente fluidas a medida que nuestras vidas pasan por diferentes capítulos. La semana pasada, Diane compartió tres cosas simples pero peligrosas a las que nunca debemos dar prioridad en nuestras vidas.
¿Qué has aprendido de estos blogs? Para muchas de nosotras, este mes se ha centrado en ver nuestras listas de quehaceres y determinar qué cosas merecen un lugar. ¡Tal vez tuviste que comprar un planificador nuevo! O tal vez has tenido que reorganizar tu rutina diaria para centrarte más en lo que realmente importa, en lugar de lo que otros estén diciendo que debería importar.
Las prioridades son un espejo implacable en nuestras vidas. Lo que más nos importa es a lo que dedicamos la mayor parte (si no todo) de nosotras mismas. ¿Te has dado cuenta de que tus prioridades están reflejando una dependencia en cosas que realmente no tienen ningún valor? ¿Estás descuidando cosas que tienen significado eterno por cosas de valor temporal?
Enséñanos a contar nuestros días, para que crezcamos en sabiduría. – Salmos 90:12
Aprendimos el mes pasado que no estamos aquí simplemente para existir por un número determinado de años. Dios ha creado divinamente un plan y un propósito para cada una de nuestras vidas, enfocado en traerle gloria y experimentar una relación con un Padre diferente a todo lo que jamás podríamos repetir en la tierra. La forma en que numeramos nuestros días determina la forma en la que nos quedamos en Su propósito. No dejes que el brillo y glamour de este mundo te distraiga de hacer lo que deberías hacer cada día. Es muy gratificante terminar un día sabiendo que has andado en el camino de Dios para tu vida. No hay ningún elogio o promoción por el cual valga la pena renunciar a eso.
Reflexiones sobre las prioridades:
- ¿Tus metas para hoy se enfocan en el valor del Reino o en el valor mundano?
- ¿Estás regularmente “comunicándote” con Dios acerca de Sus próximos pasos para ti?
- Si solo logras la mitad de tu lista de quehaceres hoy, ¿te sentirás realizada?
- ¿Cuándo fue la última vez que priorizaste una relación sobre el trabajo?
Señor, ayúdame a contar mis días. Ayúdame a enfocarme en el desarrollo de un corazón lleno de sabiduría en lugar de un día lleno de prisas y estrés. Gracias por crear el plan perfecto para mi vida, y gracias por darme la oportunidad de usar mi tiempo en la tierra para traerle gloria y llenar mi vida de alegría. Abstenme de dar prioridad a las cosas que me alejan de ti. Quita el deseo de ser admirada, venerada y definida por el mundo, y dame en cambio una constante sed de cosas de valor eterno.
Sign up to receive our Monday Morning emails and get blogs like this delivered right to your inbox!
——