Cuando Eres Uno de los ‘Quebrantados de Corazón’

“Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu.”

Salmos 34:18

En la vida no siempre brilla el sol y hay rosas. Siempre habrá días en los cuales no te sientes como ti mismo. Habrán semanas en las cuales tratarás con luchas. Habrán meses en los cuales te hallaras sufriendo una perdida.

Con la introducción de el pecado a el mundo, somos hechos accesibles a el inmenso dolor y desafío de la aflicción y el sufrimiento. Esas cosas nunca fueron parte de él plan original de Dios para sus hijos, pero últimamente tomaron parte de nuestras vidas. Tal vez has escuchado esta frase que dijo Benjamin Franklin, “Nada es seguro excepto la muérete y los impuestos”. Esta frase es mencionado de tiempo en tiempo, pero también es un recordatorio rígido de que somos incapaces de evadir la finalidad de la muérete, lo cual quiere decir que somos incapaces de evadir la picadura de el dolor.

¿Si estas pasando por un periodo de sufrimiento a travez de un capítulo difícil en tu vida, por donde podrás comenzar a sobrellevarlo? ¿Como podrás encontrar el camino que te lleva de regreso a la luz de tu vida de antes de tu actual situación? ¿Como un Cristiano, es muy probable que hayas escuchado el verso que se encuentra en el principio de este blog un millón de veces, pero tiene alguna influencia en ti cuando eres uno de los “quebrantados de corazón”?

Tal vez tengas alguien en tu vida que esta envuelto en dolor y sufrimiento y quieres desesperadamente estar ahí para ellos. ¿Sabes que decirles? ¿Sabes qué hacer? ¿Habrá una forma “correcta” o “incorrecta” de confortar? El dolor es un tiempo confuso y no solo para los que lo están experimentado. Hay un delicado y único balance que debe ser encontrado para ayudar a apoyar a alguien que está afligido o luchando. Va a requerer paciencia, un corazón fuerte, y una mayor esperanza en Dios y su voluntad.

Este mes, queremos discutir el dolor y el sufrimiento desde un punto de vista de aquellos que lo están experimentando y aquellos que los apoyan. Como mencionamos anteriormente, el dolor va a afectar a cada uno de nosotros en algún punto de nuestras vidas. Tomemos el tiempo para no solamente prepararnos para sobrellevarlo, pero también emerger al otro lado de el como un ejemplo positivo de el poder y amor de Dios.