El Por Qué nos Aburrimos Cuando Estudiamos la Biblia

¡Si hiciste click en este artículo porque el título te hablo o porque causó una chispa en tu corazón, está OK! Hay una razón por la cual probablemente nos sentimos menos entusiasmados de pasar tiempo en la palabra de Dios y no tiene que ser un sentimiento permanente. ¡LaDonna Slade, oradora, entrenadora, y coordinadora de grupos pequeños para 4word: Austin, nos comparte cuatro pasos simples para solucionar el estudiar la Biblia de una manera que lo hace fácil de seguir haciéndo!


Tienes un gran acrónimo para planear cómo estudiar la Biblia. ¿Nos caminarías por él?

¡Ciertamente! El acrónimo es P.R.E.P. Viene de la fase, preparación para la vida la cual es una de las cosas que la Biblia nos ayuda hacer.

Aquí están las definiciones para las letras:

Recoge tu Biblia
Se que esto podrá sonar obvio y hasta insultante pero es un paso fácil de sobre ver. Podemos encontrarnos muy ocupados con las cosas de la vida que el simple hecho de agarrar nuestra Biblia en nuestras manos, ya sea electrónicamente o por páginas, es una tarea que requiere de intencionalidad.

Ahora, hay un poco más detrás de recoger la Biblia del hecho físico. También se convierte en un hecho del corazón. No recogemos la Biblia para mirarla como una revista de moda. Honestamente, al menos de que seas un lector frecuente de la Biblia y encuentras los eventos en ella interesante, algo en tu vida te ha conducido literalmente a leer tu Biblia. Algún evento en tu vida o situación ha causado que tu corazón desee respuestas y alguien te dijo que las respuestas que estás buscando están en la Biblia. De otra manera, el agarrar tu Biblia intencionalmente es probablemente una de las cosas últimas en tu lista de qué hacer. Si este eres tú, no te golpees a ti misma acerca de donde cae esto en tu lista. ¡En este punto, solamente adoremos a Dios que está en la lista! ¡Estás trabajando en ello!

Léelo
Amo una grandiosa librería Cristiana. Mi favorita actual es Mardel’s. Tiene tantos recursos Cristianos de educación y libros de referencia. Me estoy empezando a sentir un poco mareada de pensar en eso. Es el nerdo de Biblia qué hay en mí.

Las preguntas que escucho con más frecuencia acerca de leer la Biblia son, ‘¿Por dónde empiezo?’ y ‘¿Como encuentro las respuestas que estoy buscando?’

¿Dónde empiezo? — Recomiendo empezar en el libro de los Efesios y los evangelios. El empezar con el libro de los Efesios te ayudará a entender tu identidad en Cristo. Después, dirígete a los evangelios (Mateo, Marcos, Lucas, y Juan) para caminar con Jesús y presenciar su vida de primera mano.
¿Como encuentro las respuestas que estoy buscando? — Puedes buscar las respuestas conforme a el problema. Digamos que estás buscando respuestas en una situación relacionada con el temor. Busca las escrituras que tienen la palabra ‘temor’ o quieres saber más acerca de lo que dice la Biblia del ‘amor’, entonces busca por las escrituras la palabra, ‘amor’.

Hay un libro de referencia llamado concordancia el que hace este proceso muy fácil. Agarra una copia de Strong’s Exhaustive Concordance of the Bible. De nuevo, busca una palabra y te dice todos los lugares en la Biblia en donde se usa esa palabra. Ahora, tengo que advertirte, el libro se ve como un diccionario gigante (también viene en una aplicación), pero no te intimides. Así como el diccionario, solamente lees las páginas o secciones que necesitas a la vez.

Equipado para acción
Nunca leerás una palabra en la Biblia que no tiene alguna acción amarrada a él. Ya sea que la acción sea física o de meditación (porque pensamos en lo que leemos), te causará a hacer algo.

Como el acrónimo arriba dice, te está preparando, el estudiar la Biblia te equipa con sabiduría, conocimiento, entendimiento, visión, ideas, y conceptos para caminar la vida que Dios te ha propuesto.

Al que lees, hazte estas preguntas:

Después de que leas hazte estas preguntas:

¿Como se aplica esto a mi vida?
¿Cómo quieres TU (Dios) que aplique esto a mi vida?

Práctica lo que has leído
Se que después que descubro una verdad que cambia mi vida o palabra en la Biblia, estoy tan emocionada de hacerlo. Me siento como un jugador de fútbol yendo al campo después de haberme emocionado por el entrenador en el vestuario. Solamente quiero correr en el campo diciendo ‘¡Vamos!’.

Después la realidad viene: no soy un jugador de fútbol. También, el juego de fútbol solo dura unas cuantas horas. La revelación o el entendimiento que recibí de la palabra fue fenomenal pero la emoción y motivación de continuar a usarlo diario solamente dura por tiempo limitado. ¡Hugh! Se que no soy la única que ha tenido esta experiencia.

¿Has visto esas camisas populares con el eslogan de ‘repite’? El eslogan hace lista de muchas palabras de acción con la palabra final que dice ‘repite’. Recientemente vi una en una camisa de ejercicio que agarró mi atención. Decía, ‘Ora, Entrena, Conquista, Repite’. Interesantemente, descubrí que en adición de que esos eslóganes sean geniales, el principio de ellos es bíblico. En Josué 1:8, Dios nos dice que meditemos en la palabra día y noche. Es una fuente de vida para nosotros.

¡Entonces tienes que practicar, practicar, practicar! Sabemos que la práctica es importante para desarrollar la competencia en lo que sea. Lo mismos es verdadero para estudiar la Biblia. Tienes que practicar continuamente lo que has leído, de palabra y, de hecho.

¿Debería de verse el estudiar la Biblia como un requerimiento de la Cristiandad o será más como un deseo?

Piensa en el Biblia como un automóvil y gasolina. Para hacer que trabaje el automóvil, requiere más de solamente tener los componentes trabajadores. Debe tener un elemento para que sea encendido y que haga que todas las partes se muevan. Requiere de gasolina.

Lo mismo es verdad cuando estudiamos la Biblia. Es un requerimiento de la Cristiandad; sin embargo, si no es emparejada con el deseo, no llegarás lejos como el caro sin gasolina. Resultaras varada a lado de la carretera, o en una situación de vida, frustrada.

Una cosa que nos ayuda a mover el celo de leer la Biblia es hacer la decisión de que la palabra tiene autoridad final sobre nuestras vidas. Es la fuente de donde hacemos toda decisión. Es nuestro respondedor primero. Esta decisión nos dará estabilidad y la fuerza para sobrevenir todo sentimiento de ‘ya sea si quiera o no’. Se convierte en un imperativo y no en un aperitivo. Esta decisión nos ayuda a sobrevenirnos a nosotros mismos e ir a ese lugar con Dios con un poco menos de gritar y patalear.

En vez de enfocarte solamente en el deseo de estudiar la Biblia, busca el deleite en estudiarla. Deleite significa ‘ser atraído’. Veo que estás alzando las cejas. Se que ese término coincide en el noviazgo o el matrimonio; sin embargo, en su núcleo, el término habla a él construir relaciones. “Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.” — Salmos 37:4

¿Es malo el sentirte aburrido cuando estudias la Biblia?

Casi puedo oírte susurrando esa pregunta, lo que quiere decir que la palabra ‘aburrido’ puede verse deshonroso cuando te refieres a la Biblia. Los dos simplemente no se mezclan. ¿Sin embargo, con eso dicho, de qué otra manera pudiera describir ese sentimiento de menos emoción que podrás experimentar cuando estudias la Biblia? Estoy segura que hay palabras más diplomáticas para usar, sin embargo, al final del día, se siente como aburrimiento.

Me soy recordada de Hebreos 4:12, donde habla acerca de las características y la naturaleza de la palabra de Dios. Dice, ‘Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.’ De nuevo, piensas, ‘¿Como podré estar aburrida al estudiar algo como eso en mi vida?’

Este sentimiento de aburrimiento puede causar fácilmente pánico en tu corazón y podrá hacerte cuestionar, ‘¿Oh no, estoy aburrida con Dios?’ Déjame decirte, creo que eso es lo más lejano de la verdad. No estás aburrido con Dios; es la relación con su palabra lo que te está dando un tiempo duro.

Algunos de nosotros hemos estado leyendo la Biblia desde que éramos niños. Nos sabemos las escrituras promocionales, hemos leído los mismos año tras año, en estudio tras estudio, y ahora cuando los escuchamos, ponemos sin intención un oído sordo. Nos decimos, ‘Ya me se ese’, lo que podrá ahogar la revelación que pudiera encender tu corazón por la palabra.

¿Sabías que el aburrimiento es primo cercano con la familiaridad y la inquietud? Se encienden el uno al otro. Nos aburrimos porque somos tan familiares y nos volvemos desencantados con eso. Esto resulta en inquietud porque aún estamos buscando por algo que reemplace ese sentimiento de aburrimiento. Cuando estos sentimientos vienen como se relata con la Biblia, necesita ser tratado si no dará oportunidad para la duda e incredulidad.

Cuando es lenta mi lectura o soy tentada de decir, ‘Ya he escuchado ese o ya se eso’, las banderas rojas suben y sé que es tiempo de mover a mi espíritu. Se que no es la palabra o Dios el cual tratan de causar inquietud o aburrimiento. Soy yo. Aún confío en Dios, El nunca cambia. Tengo que pelear para mantener la llama encendida por la palabra en mi corazón.

Mencioné anteriormente acerca de cambiar nuestra relación con la palabra. Vamos a caminar por lo que quise decir con eso. Cuando estos sentimientos tratan de agarrarse a nosotros, nuestra defensa no puede ser el estudio bíblico como usualmente. Tenemos que buscar y depender de manera agresiva en la palabra para discernir los pensamientos e intenciones de nuestros corazones. Aquí está una estrategia para usar:

La primera vez que hice esto fui guiada a un pasaje en la escritura que me enseñó a orar para acumular el fuego en mi corazón por la palabra. Esta fue mi oración basada es Hageo 1:14:

“Padre, perdóname por ser un perezoso en mi relación con tu palabra. Te pido que muevas el espíritu en mí para hacer todo lo que me has llamado a hacer. Llévame más profundo de lo que estaba antes, habré los ojos de mi entendimiento en el conocimiento de ti. Gracias por tu misericordia y amabilidad amorosa. ¡En el nombre de Jesús! ¡Amén!

¿El leer la solamente la Biblia es efectivo, o deberían haber otros pasos en tus prácticas de estudiar la Biblia?

Hay veces que cuando lees la Biblia, dirás, ‘¿Que significa eso?’ Está bien y es importante el preguntar esa misma pregunta.

Hay libros y artículos que pueden ayudar a proveer perspectiva, visión, y antecedentes acerca de ciertas historias bíblicas y eventos. Sin embargo, soy una firme creedora de leer la Biblia primero. El mantenerlo como la fundación o punto de referencia a cualquier material adicional de estudio es crítico. Por ejemplo, si estoy leyendo material adicional de estudio bíblico, siempre estoy haciéndome la pregunta, ‘¿Como se alinea lo que acabo de leer con la Biblia?’ Hago esto porque me ayuda a tener una ancla de aquella información en la palabra, para que no sea derivada por el curso de mi mente de niña.

Hay algunos maravillosos e impactantes materiales que pueden hacer la diferencia en el alivio de estudiar la Biblia. Yo recomendaría dos de mis favoritos, un diccionario bueno y una concordancia. Hablé acerca de la concordancia anteriormente como parte del acercamiento de P.R.E.P. para estudiar la Biblia.

¿Cuáles son algunos consejos que tienes acerca de asegurarte de pasar tiempo de calidad en la palabra de Dios?

Piensa en ello cómo comer rebanadas de un pastel. Quieres saborear cada rebanada con el paso del tiempo, no apurada. Normalmente no te comerías todo un pastel a una vez. Bueno, puedo escuchar a alguien diciendo, ‘¡Depende del tipo de día que haya tenido!’ ¡Lo entiendo!

Una llave a el tiempo de calidad con la palabra de Dios y es que te abras a lo que la palabra está diciendo de ti. A veces podemos leer la Biblia con brazos extendidos como si no aplicará a nosotros y es solamente acerca de alguien más y estamos leyendo su historia. ¡Es acerca de ti, también!

El tiempo de calidad en la palabra de Dios es el acercarse con una relación en mente. Hazte preguntas después de leer un pasaje en la escritura, capítulo, o libro.

Por ejemplo, acabas de leer Salmos 23 verso 1 (Salmos 23:1). Dice, “Jehová es mi pastor; nada me faltará.” Para ahí. Piensa en lo que acabas de leer, y después empieza a hacer preguntas como:

Aquí hay consejos adicionales:

¿Como puedes asegúrate de que tu definición de “tiempo con Dios” es correcta?

Siempre estamos en un ‘tiempo con Dios;’ nada más que no siempre lo reconocemos. Tendemos a estar más alertas de su presencia durante nuestros tiempos de estudio bíblico.

Este es difícil para hacer puntos porque está tan cercano al corazón. Nos ama tanto de que estoy segura de que le da mucha alegría del hecho que intencionalmente volteamos nuestros corazones a Él nada más. Él es el amador de nuestra alma y hemos decidido amarlo a Él y vivir nuestras vidas para El. Me estoy poniendo un poco sentimental ahorita. ¡Gracias, Jesús!

Okay, ya tengo Kleenex.

Podemos entrar a el tiempo cediendo por decir, ‘Aquí estoy. Aquí está mi corazón. Confío en ti. ¿Como puedo ser tu instrumento hoy?’

Sugeriría el venir a esos tiempos con Dios expectante y llena de fe. Recuerda que estás pasando tiempo con El Creador del Universo y tienes su imagen. ¡Nada es imposible para Él y tú eres su hija!

Podrás también encontrar que, aunque esté tiempo es consumido por ti y Él, no siempre se trata de ti. En realidad, la mayoría del tiempo va a tratarse de Él y su deseo de bendecirte al usarte para ser de bendición a alguien más. No te preocupes, te ha equipado y galardonado para la tarea específica de bendecir. Por eso es muy importante pasar el tiempo escuchándolo con la intención de obedecer.

El tiempo con Dios puede ser en la forma de oración, meditación en su palabra, hacerle preguntas, y adorando. Lo que es maravilloso de pasar tiempo con Dios es que puede suceder donde sea, como en el trabajo, la escuela, durante las vacaciones, o de compras. Sin embargo, el tiempo mejor con Dios viene en los tiempos de silencio, cuando nos posicionamos para decir, ‘¡Tú eres el único por el cual mi corazón late!’


LaDonna tiene más de 25 años en experiencia de consultorio de manejo en las industrias de tecnología, entrenamiento, y cambio. También tiene experiencia en el área de emprender, a través de su negocio, Velvet Leaf. Es una oradora y entrenadora. Trabaja con emprendedores, negocios pequeños, y organizaciones de sin fines de lucro para organizar a sus negocios para ser más productivos y provechosos.

En los últimos dos años, LaDonna a estado involucrada en un proyecto de pasión llamado, ‘Traction un Heels’. Produce eventos espontáneos de empoderamiento para ayudar de manera creativa a las mujeres el dar el primer paso hacia sus sueños y metas. (www.tractioninheels.com )

Para obtener más información sobre LaDonna mira: www.411-4women.com.