¿Por qué es tan difícil encontrar gozo?

 

 

“¿Estas gozoso?”

¿Te han preguntado eso recientemente? ¿Alguna vez te han preguntado eso? Te preguntan si estas alegre, pero eso no es lo mismo que estar gozoso. Por cierto, la alegría necesita gozo para ser genuino. Podemos sentir alegría temporal, pero sin el ingrediente mágico de gozo, la alegría se desvanecerá.

Tenemos un gran problema con estar gozoso. Un gran indicador de esto: el aumento de la depresión. Las mujeres experimentan depresión a casi el doble del índice que los hombres, y 12 millones de mujeres experimentan depresión en los EEUU cada año. ¿Por qué es esto? La ciencia dice que se reduce a factores como “estrés laboral, responsabilidades familiares, roles y expectativas de las mujeres y mayores índices de abuso sexual y pobreza”. (Fuente) Aquellos que creen en Dios pueden agregar otro factor a esa lista: una brecha creciente entre nosotros y la fuente de gozo que Dios ofrece a todos Sus hijos.

Nadie elegiría conscientemente evitar el gozo. Lo necesitamos en nuestras vidas casi tanto como necesitamos oxígeno. Pero el gozo es algo tan difícil de aferrar, ¿no? Cuando lidiamos con deudas, la muerte de seres queridos o el descontento político y social, entre un sinnúmero de otros “mata-gozos”, es razonable sentir que el gozo es producto de su imaginación.

“Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración.” Romanos 12:12

¿Has escuchado la historia de Job? ¿Has visto la extraña serenidad en las caras de algunos que se han enfrentado a situaciones impensables? ¿Has visto a un niño descubrir una nueva habilidad o parte de este mundo por primera vez? El gozo no es algo que se reserva para los que tienen todo yendo a su manera. El gozo es un sentimiento y un modo primordial en el que podemos vivir y operar en todo momento, sin importar quiénes somos o cuáles sean nuestras circunstancias.

“Pero ¿cómo?” Podría estar preguntando. ¿Qué haces cuando la vida viene hacia ti con un tornado de destrucción y tristeza? ¿Cómo fortaleces tu alma para resistir las pruebas que no quieren nada más que desintegrarla? ¿Pasando por las partes más bajas del dolor significa que hayas perdido tu gozo por siempre? Este mes, nos enfocaremos en lo que se necesita para mantener una “reserva de gozo” en su vida. Escucharemos a personas que se han enfrentado a lo impensable y están cantando alabanzas al Señor en lugar de maldecirlo. Únete a nosotros a medida que aprendemos lo que significa tener gozo, verdadero gozo, y cómo podemos traernos a un lugar donde verdaderamente podamos “contarlo todo gozo”.

 


 

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