Consejos para ser “la luz de Dios” en tu comunidad
Ser una influencia positiva en tu comunidad es una gran cosa para leer y discutir, pero cuando se trata de vivir realmente siendo una influencia … puede parecer una tarea un poco desalentadora. ¿Por dónde empiezas? ¿A quién deberías tratar de influir? ¿Qué pasa si sientes que no tienes a alguien a quien influenciar?
Queríamos darte inspiración para comenzar tu influencia positiva en tu comunidad con algunos consejos para el trabajo, el hogar y la iglesia. ¿Qué consejos agregarías?
Influir en el trabajo
- Tráele una taza de café a tu compañero de oficina como sorpresa o su desayuno favorito con una nota alentadora.
- Ofreze tomar el nuevo empleado bajo tu protección y guiarlos en su nueva carrera en la empresa.
- Ejerce un trato respetuoso con todos los que te rodean, ya sea alguien que estás administrando o el CEO.
- Escucha más de lo que hablas. Haz preguntas y realmente conoce a tus colegas.
- Ora por tus compañeros de trabajo, aunque nunca se enteren que lo estás haciendo.
Influir en casa
- Ten una cena sin pantalla con tus seres queridos, asegurándote de que todos se sientan vistos y oídos.
- Manten un diario de gratitud y haz un punto al final de cada día para agregarle – un corazón agradecido encontrará más difícil ser un corazón negativo. Comparte tus entradas con los miembros de tu familia.
- Si tienes hijos, acostúmbrate a tener un día asolas con cada uno de ellos todos los meses y conviértelo en un día sin interrupciones telefónicas.
- Apaga la televisión, y cuando estés mirando un programa, asegúrate de que sea algo que mirarías con Jesús sentado en la habitación contigo.
Influir en la iglesia
- Ofrece tu hogar para un estudio bíblico regular con otras mujeres trabajadoras dentro de tu iglesia.
- Llévale la cena a esos nuevos padres o lleva a una mujer soltera de la comunidad de tu iglesia a tomar un café.
- Organiza un grupo de voluntarios dentro de tu iglesia para salir a la comunidad para un proyecto práctico y impacta vidas con el amor de Cristo.
- Enseñe una clase para niños, dándoles a los padres un descanso muy necesario y la oportunidad de adorar sin interrupciones.
“Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad en lo alto de una colina no puede esconderse. Ni se enciende una lámpara para cubrirla con un cajón. Por el contrario, se pone en la repisa para que alumbre a todos los que están en la casa. Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al Padre que está en el cielo." MATEO 5:14-16
Donde quiera que estés y con quien estés, eres una influencia. Vive tu vida impulsada por la luz de Dios y su palabra y tu comunidad será mejor gracias a ti.